¿Cuáles son los errores más comunes al volante?
Todos nos definiríamos como unos chóferes excelentes, ¿verdad? Sin embargo, seguro que más de una vez hemos cometido algún error a la hora de conducir. Estos son los errores más comunes que los conductores suelen realizar y que acaban dañando tanto al coche, como a su propia seguridad o a la de las otras personas de la carretera.
- Usar la bandeja de la luna trasera como maletero
Es inevitable dejar bultos en esa parte del coche, ya sea por falta de espacio en el maletero o por comodidad. Sin embargo, ante un freno brusco o un cambio repentino de dirección, esos objetos pueden golpear a los ocupantes traseros y dependiendo de la velocidad del vehículo, incluso hacerles daño.
- Conducir con la presión de los neumáticos baja
Si no es la correcta, pueden desgastarse mucho más rápido, sufrir un reventón o que aumente la distancia de frenado. Todas las gasolineras tienen medidores de presión gratuitos y cuesta muy poco tiempo comprobarla.
- Utilizar el embrague cuando no es necesario
Muchas veces lo pisamos por simple inercia sin que sea necesaria dicha presión, por más leve que pueda ser. Eso puede generar su desgaste, el de los componentes que intervienen en su función e incluso que los frenos comiencen a fallar.
- Conducir con un postura inadecuada
A veces confundimos conducir con ver una película en el cine. En ambos lugares estamos sentados, pero la posición nada tiene que ver. Si no adoptamos una postura idónea al volante, además de daños lumbares o cervicales, influirá en el tiempo de reacción ante estímulos del exterior.
- Emplear la palanca de cambios como reposabrazos.
La palanca de cambios tiene una función mucho más importante que la de que reposes tu brazo sobre ella. Aunque parece que no afecta en nada, esa leve presión puede desajustar su mecanismo, así como desgastar los elementos de la transmisión.
- Circular con la reserva semivacía
Mientras haya algo de combustible, el coche seguirá funcionando. Sin embargo, el hecho de tener poca cantidad de gasolina o diésel afectará a la bomba de combustible, que no estará correctamente refrigerada debido a la falta de líquido y permitirá que entren más impurezas que afectarán al sistema en su conjunto.
- Dar grandes saltos en los badenes
Aunque nos sintamos en una película de Fast and Furious saltando y brincando por los badenes, esto acaba perjudicando a las ruedas y al sistema de suspensión. No cuesta nada frenar levemente antes de llegar a un badén y pasar por encima de él sin dar grandes saltos.
- Olvidarse de los espejos y los intermitentes
Aunque muchos no sepan que los espejos y los intermitentes existen, estos tienen funciones fundamentales. El empleo de ambos reduce notablemente el número de accidentes al cambiar de carril, en los glorietas o en los adelantamientos.
- Conducir muy rápido o muy lento
Existe la conciencia general de que conducir demasiado rápido perjudica al vehículo. Eso es cierto, ya que afecta al motor y a los frenos. Pero hacerlo demasiado lento tampoco hace ningún favor al automóvil, ya que circular a revoluciones muy bajas daña el catalizador en el caso de los coches de gasolina.
- Aparcar sobre la acera
Siempre vamos con prisa y nunca tenemos tiempo para aparcar bien, por eso nos conformamos con cualquier sitio. Sin embargo, hacerlo encima del bordillo daña la suspensión y los neumáticos, que acaban deformándose y sufriendo pequeños cortes.
Sabemos que quizá cometas alguno de los errores anteriores, al fin y al cabo errar es de humanos. Pero si de verdad hay un error que es imperdonable, ese es el de olvidarse pagar el ticket del parking. ¡Descárgate Moviltik y despreocúpate de tener que buscar un parquímetro para pagar el ticket!